ESPALDA


Desmitificando la vieja creencia que siempre nos han contado, la espalda no tiene que estar completamente recta mientras realizamos tareas cotidianas o ejercicio físico. La columna vertebral tiene unas curvaturas naturales, que hacen que se realice una presión uniforme sobre los discos intervertebrales y puedan aguantar una mayor presión. Si se alteran las curvas de forma repetida en el tiempo, el peso recae sobre una parte del cuerpo vertebral que provoca a su vez presión sobre el disco y el desplazamiento del núcleo. Aplicándolo a cualquier otro objeto que sujete otro, lógicamente nos damos cuenta que la estabilidad es mayor cuanto mayor sea la base y, si la base es completamente recta es mucho más fácil que se rompa que si tiene unas curvas que le den estabilidad.


Para una correcta ejecución sin afectar a la espalda. Lo más recomendable sería la de realizar una inclinación del tronco siempre a partir de una flexión de cadera realizando una anteversión de pelvis(sacar culo) para mantener la curvatura natural o lordosis fisiológica  de la espalda mientras se realiza una inclinación, de tal manera que se implica al mínimo la contribución dinámica de la columna. Recoger un objeto del suelo, levantarse de una silla, cepillarse los diente, vestirse,…, la anteroflexión del tronco esta presente en la inmensa mayoría de actividades diarias y movimientos especificas del deporte. Un gesto técnico que de sino se realizarse correctamente, predispone a un estrés recurrente sobre la columna.


La columna vertebral no es un estructura diseñada para trabajar en grandes rangos de movimiento. Existe una zona útil de amplitud, donde la acción muscular se ve facilitada y la carga en estructuras pasivas es prácticamente nula; abarcando mas allá de este rango de amplitud, la musculatura abandona su participación y la estabilidad del raquis queda a expensas de ligamentos, articulaciones y discos intervertebrales. Por lo tanto no es de extrañar, que ciencia corrobore una fuerte asociación entre una postura reiterada de inversión lumbar con repercusiones discales.



Si analizamos la técnica correcta para realizar un levantamiento, la acción precisa una inclinación del tronco. Por tanto hay que terminar con la creencia de que todavía hoy en día se enseña a pacientes de espalda un gesto antifuncional como tratar de levantar un objeto manteniendo la columna vertical. Ya que como vemos en la imagen 3 el peso recae sobre la articulación de la rodilla. 

Existen múltiples estrategias para conseguir una buena postura, pero como punto de partida se debe de situar siempre el aprendizaje de la basculación pélvica y la toma de conciencia de esta acción en la postura lumbar (se realiza en decúbito supino (boca arriba), cuadrupedia (4 apoyos), sentado y finalmente en bipedestación).

3 comentarios:

  1. no se quien eres pero la verdad es que te lo has currado

    saludos
    yo también soy profe de pilates

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias.
    Dejo la puerta abierta a todo quien quiera aportar conocimientos.
    Un saludo

    ResponderEliminar
  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar